2012/12/25

nostalgiando



la nostalgia es un pajarito, una libélula, una mariposa; la nostalgia se va, se ve hermosa, como la certeza de alas propias y libertad; la nostalgia vuelve, se nos posa en la boca, nos impide hablarle al mundo, la nostalgia aletea en nuestros párpados, no quiere que veamos, solo quiere que escuchemos el silencio de su vuelo en nuestra alma… la nostalgia no tiene un nido, no está quieta, siempre es cálida, no siempre es buena… 

hoy, por ejemplo, me duele nostalgiar…




2012/12/23

números, cuentas y razones


Hay días en los que sumo y resto hasta hallar que la respuesta es lo de menos: lo demás. Lo esencial (sí, aquello de lo que hablaba el zorro con el Principito) no se cuenta con números, ni siquiera con letras. Sensaciones, emociones, instantes, recuerdos, planes, sonrisas, lágrimas, besos, miradas, abrazos y la nada no se cuantifican ni se traducen, porque si se lo hace pierden su sentido y nos perdemos con él.

Los números son signos muy útiles, sin duda, pero se vuelven maravillosos cuando nos permiten ver más allá de ellos... Contamos el paso del tiempo, las monedas que tenemos en el bolsillo o la cuenta de banco y las personas que pueden estar dentro de determinado círculo. Es vital, creo yo, darle más peso a la vida que al tiempo, al valor que al precio, a la humanidad que a las etiquetas con las que clasificamos a la gente. 

Si la razón de ser de algo/alguien se limita a ver en todo una cifra, no tiene razón de ser.

2012/12/13

lluvia, tiempo


hace años aprendí a caminar bajo un cielo gris de fin de mundo, 
es que siempre se esconde un arcoiris sobre la ciudad

burbujas fuera de las personas
sol lejano, uno

es tiempo de lluvia, se siente el ritmo alterado de los espacios



a veces lo veo, es un mundo gris de fin de cielo
la ciudad está sobre el arcoiris
hay personas dentro de burbujas
y apenas queda un lejano sol en los espacios alterados de ritmo hueco 



lluvia de tiempo.



cielo gris de fin de mundo
arcoiris sobre la ciudad
sol lejano, uno

tiempo de lluvia 


mundo gris de fin de cielo
ciudad sobre un arcoiris
lejano sol, lejano



lluvia de tiempo.




2012/12/10

Me miré a los ojos

Dijo que había contado mis pasos. Dijo que conocía de memoria el ritmo de mi respiración. Dijo que será mi sombra, que es mi sombra, que lo fue antes de que supiese de su existencia.

Esa noche apagué el teléfono, cerré mi puerta y miré por quince minutos el techo. Busqué dentro de mí algo que se pareciese al miedo, algo que me impidiese sonreír, algo que demostrase que sus palabras aún tenían importancia. Nada. Repasé cada frase, cada intento de intimidarme, de asustarme, de dolerme, de mover mi piso para que vuelva a caer, pero no sentí nada.

Me levanté, encendí el teléfono, abrí la puerta y la ventana, respiré profundamente, fui hasta el espejo y miré mis ojos: me gustó hallar luz en ellos.